La primera vez que escuché el nombre de Lucho Barrios, fue cuando le pregunté a mi papá quien cantaba la canción que el tantas veces me dedicó: Mi niña bonita, es por eso, que sin conocerlo en persona, me atrevo a decir que al partir, siento que me toca el corazón. Esa canción marcó mi vida, soy la hija mayor de 2 hermanas, y obvio, mi papá en un inicio quiso que fuera varón. Ahora años después, está contento no solo con que yo haya nacido mujer,  sino con ser chancletero, tengo una hermana y ahora la familia aumentó con mi hija. Es decir, en casa somos mamá, mi hermana, mi hija, mi papá y yo, casi casi un matriarcado.

Pero fuera de esta anécdota personal, que seguro comparto con la gran mayoría de chicas cuyos papás también le dedicaron esta canción, no deja de apenarme la muerte de Lucho Barrios, no solo por su partida en sí, pues finalmente es la ley de la vida que uno parta a cierta edad, sino por el abandono en el que se encontraba.

Es triste, ver que nuestros artistas, nuestros grandes músicos y cantantes, nuestras viejas glorias estén abandonadas a su suerte, contando solo con el apoyo de unos cuantos familiares, cuando considero que es el gobierno el que en gratitud debería darles por lo menos un seguro permanente, el seguro social. Que Lucho Barrios haya sido atendido en el hospital 2 de mayo ubicado en La Victoria, cuando quienes cubrimos a diario noticias, sabemos que no es precisamente el mejor hospital de Lima, da pena, porque merecía un trato mejor.  No lo puedo asegurar, pero creo que en una clínica o hasta un hospital de Essalud hubiese podido vivir un poco más.

Me parece bien que el Congreso, el gobierno, la muni de Lima condecoren a cuanto artista extranjero, está bien, pero estaría mejor si hicieran lo mismo con nuestros artistas peruanos. Por qué tienen que esperar que fallezcan para rendirles un homenaje póstumo? Por qué?...   Dentro de todo, gracias a la amistad del Zambo Cavero con el Presidente, se debe a que él y artistas como Jesús Vasquez hayan sido velados en el museo de la nación. Ahora harán lo mismo con Lucho Barrios.

Pero hasta cuándo seguirán enfermando y muriendo en el abandono nuestras estrellas de la música? Porqué no darles una casa de Mi Vivienda, un seguro, un homenaje en agradecimiento a sus canciones y grandes momentos, a las alegrías que nos pudieron causar. Si bien, muchos artistas han tenido vidas bohemias y perdieron el dinero que ganaron en juegos, alcohol y mujeres, creo que el Gobierno debe reconocerlos por darnos alegría.

Gracias Lucho Barrios, gracias por mi NIÑA BONITA!!! Gracias por cantar con tanto sentimiento esa canción, que descanses en Paz... Endulza ahora a las angelitas en el cielo con esa canción.